Hola,

He vuelto de la salida que había comentado en la entrada anterior y la verdad no fue como me lo imaginaba, además de que mucho de lo que viví estoy segura serán experiencias irrepetibles, tanto por el contexto como por el lugar al que fui. A partir de ahora me permitiré romper algunas reglas de la buena escritura, como el hacer que todos los párrafos sean mucho más cortos de lo que deberían.

La última línea de la entrada anterior fue "Ánimo a mí misma que será una muy buena nueva experiencia de la que aprenderás mucho" pues la verdad sí, lo fue. La salida siempre la supe como una salida de trabajo y lo fue, trabajábamos hasta tarde, el trabajo era más demandante y, sobre todo, no hubo días libres.

Cuando me dieron la fecha para la salida fue un día lleno de nervios y arrepentimiento de aceptar ir, obviamente por las razones ya mencionadas en la entrada anterior, incluso se tuvo que gastar mucho más dinero de lo que pensé debido a que no tenía nada para esa salida. Eso fue lo que más me estresó, el hecho de que tendría un viaje y tenía, no sólo pocas cosas que llevar, sino que también tenía muy poca experiencia preparándome para ese tipo de viajes. Para mi preparación me tuve que poner en contacto con mi compañera Lili, a quien le estuve preguntando todo, básicamente porque no conocía muy bien a Esteban, mi otro compañero, pero Lili muy amablemente me ayudó sin ningún tipo de molestia o bueno eso es lo que creo 😂.

Luego de haber comprado todo y gastar más de lo que había hecho antes, llegó el día y cuando me desperté a las 4 am había dormido muy poco y estaba muerta de nervios debido a mi miedo por el vuelo, ¡MI PRIMER VIAJE EN AVIÓN! 😲, me preparé junto con mi mamá y mi hermana que me llevarían hasta el aeropuerto. Pedimos un Uber y partimos, claro que antes me despedí de mi papá, el uber que llegó fue un auto bastante lindo y amplio, hasta me dieron ganas de comprarme un auto así para mí 😂, pero a pesar de eso, todo el camino fui tomada de la mano de mi mamá que también estaba temerosa de la partida de su hija y yo, bueno pues, por el viaje. Al llegar al aeropuerto y por mi falta de experiencia tuve que preguntar dónde debía ir, para ello el amable personal del lugar me guío al lugar al que tenía que ir para poder entrar a la sala de espera.

Ese fue el momento en que más miedo tuve, por primera vez tuve que despedirme de mi familia a la que no vería por más de 48 horas, que era lo máximo de lo que me había separado de ellos. Me despedí de mi mamá y mi hermana que estaban al igual que yo, asustadas y a punto de llorar, me di media vuelta e hice la fila para pasar el filtro. En ese momento no tenía ni idea de nada por eso hice lo que todos hacían, para disimular un poco el hecho de que era primeriza, por suerte a lo lejos vi a Lili, esto me dio más confianza y me tranquilicé un poco, sin embargo, antes de que me acercara a que revisaran mi chek-in volví mi cabeza para ver a mi familia que seguían ahí, con una mueca de ganas de llorar las vi, entregue el código de barras de mi check-in y pasé a los filtros de seguridad.

Ya en los filtros traté de hacer todo lo más natural que pude, fue en este momento donde perdí de vista a Lili, pero no fue suficiente. Puse mi maleta como todos en la cinta transportadora, usé una bandeja para dejar los objetos personales, pero lo que no hice fue sacar mi computadora, esto también debe hacerse, ¿por qué? no tengo ni idea, supongo que para revisar que mis aparatos electrónicos no contengan nada extraño. Este error lo notó una de las chicas que estaba revisando las pertenencias, sin embargo, me dijo muy, pero muy amablemente lo que debí haber hecho desde el principio y me dijo "para la próxima saca debes poner cada uno de los aparatos electrónicos grandes en una bandeja porque si no debes salir de la fila y volverte a formar", yo obviamente le dije que "sí" algo nerviosa y con eso me dejó pasar.

Del otro lado del filtro me impresioné por la cantidad de personas y de movimiento que había, aquí entendí, gracias a lo que otras personas a mi alrededor decían, que tenía que ver cuál era mi vuelo e ir a la sala de espera. Estuve esperando un rato mientras observaba las pantallas, pero no pude ver mí vuelo por lo que me acerqué a otro trabajador del aeropuerto y le pregunté sobre mi sala de espera, de nuevo y sin excepción se portó super amable y luego de revisar una lista me indicó a donde tenía que ir. Fui todo el camino en medio de unos niños que también iban de viaje, pero al llegar ya estaban en el lugar mis dos compañeros, me acerqué y me senté con el corazón latiendo a mil por hora por lo próximo que estaba el vuelo.

Por ahora dejaré la historia hasta aquí, ya que es muy tarde y quiero dormir, pero también porque creo que fue un montón de texto en una sola entrada. Mañana seguiré escribiendo.

Y para mi yo del futuro: Estoy segura de que cuando leas esto, todo habrá valido la pena.